navidades tragicas

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Navidades trágicas es una novela policiaca escrita por la escritora británica Agatha Christie, publicada originalmente en el Reino Unido en diciembre de 1938​ y en Estados Unidos en 1939 bajo el título Murder for Christmas.​
Cuenta una historia plagada de suspense.

Es Nochebuena y la reunión familiar de los Lee se ve interrumpida por un estruendo seguido de un grito que proviene del piso de arriba. En una de las habitaciones, el cuerpo del despótico patriarca Simeon Lee descansa sobre un charco de sangre, con un corte en la garganta.Cuando llega, Poirot se encuentra con una atmósfera de desconfianza y sospechas mutuas. Parece que todo el mundo tenía sus razones para odiar al anciano. 

Un asesinato brutal resuelto de forma soberbia

Es Nochebuena y la reunión familiar de los Lee se ve interrumpida por un estruendo seguido de un grito que proviene del piso de arriba. En una de las habitaciones, el cuerpo del despótico patriarca Simeon Lee descansa sobre un charco de sangre, con un corte en la garganta.Cuando llega, Poirot se encuentra con una atmósfera de desconfianza y sospechas mutuas. Parece que todo el mundo tenía sus razones para odiar al anciano. 

  • Colección: BOOKET
  • Peso: 132 gr
  • Grueso: 1 cm
  • Ancho: 12.5 cm
  • Alto: 19 cm
  • Fecha de lanzamiento: 04/10/2018
  • Traductor: JOSÉ MALLORQUÍ FIGUEROLA
  • Plaza de edición: BARCELONA
  • Año de edición: 2018
  • ISBN: 9788408195245
  • Encuadernación: Tapa blanda
  • Idioma: CASTELLANO
  • Editorial: PLANETA
  • Nº de páginas: 208

Este libro ha sido escrito y pretenece a Agatha Christie

Es nochebuena. La cena de la familia Lee es interrumpida por un ruido de muebles que se rompen, seguidos de un grito desgarrador. En el piso superior, el cuerpo del tiránico Simeon Lee yace muerto sobre un charco de sangre, con el cuello cortado. Pero cuando Hercule Poirot, quien pasa las Navidades en el pueblo en casa de un amigo, se ofrece para ayudar, se encuentra con una atmósfera de mutua sospecha. Aparentemente, todos tenían razones para odiar al viejo…

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